Su efecto, de hormigueo punzante y localizado, se empieza a notar al cabo de unos 15-30 segundos de la aplicación, y puede durar en algunos casos hasta 45 minutos. Una sola gota de Oh! Holy Mary aplicada en zonas erógenas, hace que se inicie un efecto cosquilleante muy intenso, similar al roce de un juguete erótico pero sin usar la manos. 0% THC